Ejercicios para entrenamientos de Fútbol 7: Tácticas y estrategia

La diferencia en el fútbol 7 se hará con el desarrollo de tácticas y estrategias, dependiendo el tipo de alineación, las características del propio equipo y el rival. Resulta fundamental realizar ejercicios para entrenar y mejorar una defensa que pueda mutar en fuerza de ataque, consolidar un eje en el mediocampo y/o transformar delanteros con gol a asistidores.


Redacción de textos y contenidos de Berni S.
Entrenador federado de fútbol 7
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La alineación clásica, 2-3-1

Se trata de una alineación equilibrada, en gran medida por los laterales o bandas. Es que a la hora de defender suelen bajar hasta conformar una línea de cuatro en el fondo. Asimismo, al momento de atacar, forman tres en el mediocampo y hasta pueden subir como extremos. 

Otra posición clave es la del mediocampista central, ya que apoya a los dos centrales en jugadas defensivas, distribuye y abre juego con los laterales y asiste al delantero. En jugadas ultraofensivas también puede actuar como líbero, dejando a los dos centrales abiertos, actuando de laterales y posicionando a los bandas como extremos.

Alineación 3-2-1: es clave el despliegue de la defensa

A diferencia de la formación anterior, contar con tres defensores de inicio suele implicar superioridad numérica si el rival presiona con un solo delantero, por lo cual se suele alternar con solo dos defensores para las salidas, y aprovechar el tercero como lateral de ataque. Pero si el rival presiona con más jugadores y tapan carriles del medio, es útil la línea de tres para aprovechar la salida por los carriles externos. También es funcional que los laterales arrastren las marcas de los delanteros rivales para que el central suba y continúe la jugada con los mediocampistas, idealmente posicionados en forma escalonada.

Ejercicios para profundizar ataques por las bandas

Para lograr un despliegue en ataque eficaz por las bandas en el fútbol 7 es importante entender el esquema táctico propio y del rival, y realizar ejercicios en ese sentido. Por ejemplo, si el equipo contrario no presiona tanto en ataque (digamos con un sistema 3-2-1), los laterales tendrán mayor libertad para atacar, y la superioridad numérica en defensa permitirá que algún central acompañe al ataque para hacer un 2 vs 1 en campo rival. Otra alternativa es que el delantero centro deje de ser una referencia en el área y se tire hacia una banda, asociándose a un lateral y dejando camino libre para que el banda del otro carril dirija una diagonal al centro.

Ejercicios y tácticas defensivas

Si el rival es superior, hay que saber defenderse. En estos casos, lo primordial es bloquear pases por el carril central. Por ejemplo, si jugamos con dos delanteros (alineación 3-1-2) será importante que uno de los atacantes presione sobre las bandas y el otro se cierre al centro y viceversa, para evitar que el mediocampo rival reciba de laterales y centrales. Otra opción es aplicar un esquema 2-2-2, con los medios bien abiertos cubriendo a los laterales y los dos delanteros marcando a los mediocampistas rivales, dejando libres a los centrales del equipo contrario. Una alternativa más arriesgada sería aplicar un 1-4-1, para hacer una marca “hombre a hombre”, en particular en el medio campo.

Ejercicios para trabajar en los corners

Hay diversas variantes para perfeccionar las jugadas de corner. Una de ellas puede ser jugar en corto, descolocando a la defensa rival, y enviar un centro sobre la zona del primer palo. Otra táctica consiste en juntar jugadores sobre el primer palo para despistar al rival, pero enviar el balón hacia el segundo. Una jugada más actual es una formación en línea sobre el borde del área, que al momento del envío se despliega en distintas direcciones. También se puede utilizar el recurso de un jugador fuera del área, supuestamente desentendido de la jugada, atento para un remate de media o larga distancia.

El mediocentro en el fútbol 7, eje del equipo

Es muy importante para el fútbol 7 saber ubicarse dentro del campo, especialmente el mediocampista central, ya que suele intervenir en todas las jugadas, de ataque y defensa. En el sistema 3-2-1, por ejemplo, serían dos mediocampistas con roles distintos, uno volcado más a la defensa y otro al ataque. Esto se puede ir alternando o quedar fijo, dependiendo las características de cada jugador, pero uno siempre se ubicará más cerca de la defensa y otro acompañará desde atrás al delantero.

En cambio, en el sistema 2-3-1, el mediocentro cumple otro rol, ya que los otros dos medios tienden a volcarse más al ataque, dejando vulnerable el medio para los contraataques, con mucho trabajo para el mediocentro, de contención en este caso.

Y concluimos que…

Un equipo considerado defensivo o conservador puede sorprender en ataque (con laterales volcados al ataque, por ejemplo, en el sistema 3-2-1), mientras que equipos planteados para se ofensivos, pueden variar su esquema y mudar roles (delanteros volcados al mediocampo en el sistema 2-2-2), para cambiar por completo la estrategia de juego. 



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