La natación en aguas abiertas es mucho más exigente que la natación tradicional. El movimiento de las aguas y las inclemencias del clima hacen de esta disciplina un deporte muy duro. Por eso, es importante tener conocimiento de las medidas de seguridad y el equipamiento necesario para practicar esta variante.
Redacción de contenidos de Fabián H.
Entrenador de natación / Triatleta
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Consejos para practicar natación en aguas abiertas
Para nadar en aguas abiertas, es importante considerar que hay que realizar un arduo entrenamiento. No se debe comparar con un entrenamiento para la natación convencional. Se requiere mucha más fuerza y resistencia. Pero también, mucho tiempo y dedicación. No se recomienda comenzar a nadar en aguas abiertas con un entrenamiento de una o dos semanas previas. Se requieren meses de fortalecimiento y práctica para comenzar.
Adaptarse practicando en aguas abiertas
Por supuesto, otra cuestión es adaptarse a las aguas abiertas. Es decir, no practicar en piscinas de natación profesionales, sino directamente sumergirse en las aguas naturales, desde ya con las precauciones del caso, medidas de seguridad y equipamiento adecuado.
Algunas cuestiones básicas son similares en aguas abiertas y natación tradicional, como tomarse los tiempos y medir distancias.
Comenzar a nadar en aguas abiertas implica que habrá muchos cambios de ritmo, por los cambios en el flujo de la corriente. Adecuarse a esos tiempos es fundamental.
La seguridad en la natación en aguas abiertas
Entre las principales medidas de seguridad para nadar en aguas abiertas es indispensable entender cómo se comportan las mareas y las corrientes. En ocasiones, puede que comencemos una carrera con un flujo de agua, pero atravesemos con un flujo distinto, lo cual nos puede desviar de nuestro destino.
Corrientes de resaca o retorno
En estos casos, es importante conocer e identificar las corrientes de resaca o retorno. Esta corriente se genera cuando tras romper las olas, el agua vuelve hacia el mar por un canal estrecho. En este caso, el agua se mueve muy rápido y con fuerza hacia dentro. Es importante nadar en paralelo con dicha corriente, hacia la costa.
Nadar en aguas abiertas: los ríos
En el caso de los ríos, nadar suele ser un poco más simple que en aguas abiertas costeras. Sabemos que van en una sola dirección y es más difícil desviarse del curso por un cambio en el flujo de la corrientes. Sin embargo, es para tener en cuenta la velocidad que puede tomar el agua. En ocasiones, puede que parezca un flujo lento, cuando se torna en realidad un rápido.
Hay que ganarle al clima: calor, frío, viento…
El factor climático es fundamental para el nado en aguas abiertas. Si bien nadar periódicamente en esta variante prepara el cuerpo para afrontar diversas condiciones, hay que tener en cuenta que el calor excesivo (nadar bajo más de 25°) puede provocar deshidratación. Por tanto, es recomendable tomar mucha agua en estos casos.
Por el contrario, nadar en aguas frías requiere de un abrigo inmediato al momento de salir del agua, debido al cambio brusco de temperatura.
En cuanto a días ventosos, es importante aprender a nadar respirando hacia ambos lados y no de frente, evitando así tragar agua por algún movimiento brusco de la corriente.
Equipamiento para practicar natación en aguas abiertas
Dependiendo de las condiciones del clima y del agua, se recomienda utilizar cierto tipo de equipamiento. Si las condiciones son de calor intenso, se aconseja utilizar bañadores de slip para hombre o de una pieza para mujer utilizados en natación por la poca resistencia que ofrecen al agua. En caso de que el agua esté fría, entones tendríamos que pensar además en ir con neopreno.
También conviene llevar gafas de natación con protección solar para mejorar la visibilidad.
Y es importante, no por una cuestión de estilo, sino de ubicación, utilizar gorras de natación brillantes o de un color llamativo. Esto será para lograr una mejor localización ante aguas turbulentas y oscuras.
Además, es importante contar con boyas de natación para aguas abiertas, que no cumplen la misma función de salvavidas, pero sirven ante situaciones complejas.
En conclusión
Hemos repasado los aspectos fundamentales en cuanto a seguridad y equipamientos que debes considerar antes de aventurarte a practicar natación en aguas abiertas. Esperamos que este artículo te haya servido de mucho, y si es así que lo compartas con quienes tengan interés en empezar a nadar en mar o río.